E L U L I M
O A Ñ O D E L A E S P E R A.
En el mes de Diciembre del año de 1.991, hubo una
especie de alerta donde se manejo la posibilidad de que muy
probablemente el DIA “D” seria el 10 de Diciembre de ese año , el lugar
seria La BASE AEREA EL LIBERTADOR en el Estado Aragua, cuando se estuviera
celebrando el acto central del LXXI Aniversario de la creación para aquel
entonces de nuestra Gloriosa Fuerza Aérea Venezolana, la operación no se
materializo por encontrarse en comisión de servicio en Israel en Tcnel (EJNB)
Francisco Javier ARIAS Cárdenas, 1er Cmdte del Grupo de Artillería Misilistica
General José Tadeo MONAGAS, acantonado en el Cuartel Libertador de la Ciudad de
Maracaibo, Edo Zulia, ello debido a que ese Estado con su principal potencial
estratégico petrolero era vital para el desempeño de los acontecimientos e
igualmente por ser la sede de la 1ra División de Infantería con su gran
cantidad de unidades militares y sus respectivos Comandantes y Oficiales que
también estaban juramentados y comprometidos en el plan de salvación
Nacional, inclusive de mi promoción en esa zona y en el resto del país
totalizábamos mas de diez Oficiales Superiores, pero solo dimos la cara para la
acción militar dos, el Tcnel (EJ) Francisco Javier ARIAS Cárdenas y mi persona,
los otros compañeros de promoción al igual que de las otras promociones
después que estábamos detenidos en los diferentes centros de
reclusión mandaban a informar que no participaron por diferentes causas y
motivos tales como: no me
avisaron a tiempo, donde me encontraba no había cobertura para ningún celular,
mi esposa estaba dando a luz, me encontraba en el exterior cumpliendo una
misión muy importante y no pude participar ese día, tenia un familiar
de mi entorno muy delicado de salud, me tenían vigilado y no pude actuar, no se
que me paso en ese momento y me quede en el sitio y por eso no cumplí la misión
etc. Pero lo peor de todo es que en la actualidad y desde hace muchos años un
alto % de ellos no solamente en el Ejercito sino en los otros Componentes
continuaron su carrera militar como si hubiesen participado activamente,
llegando al caso de ser condecorados aceptar las Ordenes 4-F/92 y
27-N/92 y lucirlas en su pecho como combatientes aguerridos, otros
retirados como Coroneles, Generales de Brigada, División, Mayor General e
inclusive el máximo grado militar de General en Jefe, o actualmente ostentar
algunos esos grados militares o formar parte del Gobierno Nacional ocupando
cargos relevantes en el tren ejecutivo o en el equipo gubernamental tales
como: ministros, embajadores, gobernadores, alcaldes, curules como diputados de
la Asamblea Nacional, Presidentes de Institutos Autónomos asesores externos o
internos en dependencias publicas o simplemente contratistas de
empresas que trabajan haciendo obras espectaculares para el Estado.
Inclusive hay casos de oficiales que por voluntad propia se negaron
a involucrarse el mismo día de la rebelión tomando otros rumbos sin
riesgos, pero lo mas increíble es que en la actualidad hay oficiales que
antes del 4-F/92 y 27-N/92 fueron nuestros compañeros de la causa
Bolivariana, inclusive juramentados, manifestaron principios, basamentos
morales y nacionalismo a toda prueba que esgrimían en las reuniones previas a
la acción militar que ocurriría, pero al momento de las 2 operaciones militares
cambiaron de actitud llegando al caso unos de emplazarnos con sus unidades
militares que comandaban, otros verbalmente insinuaron a vox populi que éramos unos
desadaptados y desquiciados mentales, pero lo mas degradante y penoso es que
hay casos en que esos oficiales comprometidos con la causa ahora forman parte
del Cuerpo Diplomático y ocupan cargos dependientes de la Cancillería , o son
Directivos de CONVIASA, tal es el caso del Tcnel (AV) Isnaldo Di Sabatino Rojas
. (Leer titulo siguiente LA
MISION Y EL OBJETIVO).
Desesperante fue el transcurrir del tiempo, lo
catalogue como el peor enemigo, al pasar inevitablemente los días,
semanas y años me pareció una eternidad peligrosa ya que con cada día que
se iniciaba, el grupo seguía creciendo como la espuma de la cerveza con adeptos
a la causa, infiltrados, delatores y oficiales verdaderamente nacionalistas que
participarían en un lapso de tiempo que no se conocía, tal y cual como si fuera
una avalancha que caería sobre la Venezuela corrupta que no aguantaba mas el
poder de la metástasis de la corrupción, llego el momento en que por lo seguido
de las reuniones clandestinas y observando que habían fallas de seguridad
elementales y otras muy graves donde no había el compartimiento de las
informaciones, por lo tanto al estar en juego la seguridad de mis
familiares y la mía, resolví decirle al Tcnel (EJNB) Jesús URDANETA Hernández
que faltando 1 mes para el día “D “ hora “H” me avisara para prepararme
mentalmente en la misión que debería cumplir la cual la desconocía en ese
momento.
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